El pasado 12 de diciembre, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) declaró ilegal la ‘Contribución por el Servicio Vial’, un impuesto portugués que se aplicaba a los combustibles desde 2007. Esta decisión supone un importante precedente para el sector del transporte de mercancías, ya que afecta directamente a los profesionales que operan en la frontera entre España y Portugal.
El ‘céntimo sanitario’ portugués era un recargo de 10,5 céntimos por litro que se aplicaba al diésel, la gasolina y el gas licuado de petróleo (GLP). El objetivo de este impuesto era financiar el mantenimiento de las infraestructuras de transporte en Portugal, pero su aplicación fue cuestionada por la Comisión Europea, que lo consideró incompatible con la normativa comunitaria.
El TJUE ha dado la razón a la Comisión Europea y ha declarado ilegal el ‘céntimo sanitario’ portugués. El Tribunal ha argumentado que este impuesto no cumple con los requisitos establecidos en la Directiva sobre Impuestos Energéticos, ya que no está vinculado a un objetivo medioambiental específico.
La decisión del TJUE tiene un impacto directo en el sector del transporte de mercancías, ya que los profesionales que operan en la frontera entre España y Portugal se veían obligados a pagar el ‘céntimo sanitario’ portugués cuando repostaban en el país vecino. Este impuesto suponía un coste adicional para las empresas de transporte, que se veían obligadas a repercutirlo en los precios de sus servicios.
El fallo del TJUE abre la posibilidad de que los transportistas españoles que hayan repostado en Portugal durante los últimos cuatro años puedan reclamar el importe pagado por el ‘céntimo sanitario’. Sin embargo, el proceso de reclamación puede ser complejo y tedioso, por lo que es importante que las empresas de transporte se asesoren adecuadamente para poder recuperar el dinero que les corresponde.
Además del coste económico, el ‘céntimo sanitario’ portugués también tenía un impacto negativo en la competitividad del sector del transporte de mercancías en la frontera entre España y Portugal. Las empresas españolas que operaban en la zona tenían que pagar un impuesto adicional que no tenían que pagar sus competidores portugueses. Esto generaba una situación de desventaja competitiva que perjudicaba a las empresas españolas.
El fallo del TJUE supone un paso adelante para la igualdad de condiciones entre las empresas de transporte de mercancías de España y Portugal. Sin embargo, es importante que la Comisión Europea siga trabajando para garantizar que todos los Estados miembros de la Unión Europea cumplan con la normativa comunitaria sobre impuestos energéticos.
El fallo del TJUE sobre el ‘céntimo sanitario’ portugués podría tener las siguientes consecuencias para el transporte de mercancías:
Posible aumento de la presión sobre otros impuestos energéticos: El fallo del TJUE podría generar presión sobre otros impuestos energéticos que se consideran incompatibles con la normativa comunitaria. Esto podría conducir a una reducción de los ingresos fiscales de los Estados miembros de la Unión Europea.
En cualquier caso, el fallo del TJUE sobre el ‘céntimo sanitario’ portugués es una buena noticia para el sector del transporte de mercancías. La eliminación de este impuesto supondrá una reducción de los costes de transporte y una mejora de la competitividad del sector.
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